Aún no está claro si Morena, en el Poder Legislativo Federal, retomará el matrimonio igualitario; un verdadero misil. Tal vez AMLO no quiera desgastarse y deslice el arma al PT o al PRD. ¿Qué hará la LX Legislatura del Estado de México respecto a este «cariñoso» asunto?

Recordemos que en 2016 el entonces Presidente Enrique Peña Nieto (EPN) envío una iniciativa, para hacer posible que dos personas libres, mayores de edad (independientemente de su sexo biológico) pudiesen contraer nupcias civiles. Como se sabe, tal propuesta no floreció en dos asuntos fundamentales: 1) Que cualquier pareja de homo-enamorados(as) pudiesen adscribirse a tal figura jurídica y, 2) Que parejas del mismo sexo pudiesen adoptar. El pensamiento heterosexista y judeo-cristiano quebrantó al Estado Laico.

¿Ventajas de aquella audacia, en caso de haber prosperado? Políticamente hablando, el PRI le habría quitado una de las banderas progresistas a la Ciudad de México (PRD), pues desde 2009, en la capital del país, habían iniciado las bodas entre personas del mismo sexo; más tarde, se logró la posibilidad de adoptar infantes por parte de las homoparejas. Es cierto que en 2006 se aprobaron las Sociedades de Convivencia, pero en estricto sentido tales uniones no gozaban de las mismas consideraciones civiles.

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Para determinados homo-novios(as), el hecho de poder casarse civilmente (no por vía religiosa, líbrenos Dios) no solamente les restituye el merecido lugar que todos deben tener frente a la Ley, sino que pone al día el pleno ejercicio de sus Derechos Humanos.

Mediante dicha figura legal, se pueden hacer uso de derechos fiscales, de propiedad, disposiciones compartidas ante situaciones de migración, decisiones subrogadas ante casos de emergencia médica y, en caso de deceso de un integrante de la pareja, es posible recibir determinados beneficios o ayudas, como sucede en el maridaje heterosexual.

En tanto se trataban de homologar derechos y obligaciones, como sucede en las nupcias convencionales, la iniciativa incorporó las figuras del divorcio incausado y el divorcio administrativo. Cuando se quiere lo mismo que los demás, hay que estar dispuestos(as) a pagar las consecuencias de tan acariciado sueño. Veremos si la Cámara de Diputados mexiquense, ahora sí, saca la casta y quiénes.